El Camino Primitivo, la ruta más antigua y auténtica del Camino de Santiago, es una experiencia única que atrae a miles de peregrinos cada año. A través de sus paisajes montañosos, pueblos pintorescos y una rica historia que se remonta a más de mil años, esta senda ofrece una aventura espiritual y personal inigualable. Si todavía no la conoces, en este blog te contamos 4 razones por las que hacer el Camino Primitivo.
Por su historia y sus leyendas
El Camino Primitivo, llamado así por ser la vía más antigua de todas las que existen, une Oviedo con Santiago de Compostela atravesando diversos pueblos del interior de Asturias y Galicia. Como no podía ser de otra manera transcurriendo por estos territorios, alberga multitud de vestigios históricos y leyendas. Te contamos una de ellas, pero para descubrirlas todas tendrás que hacer el Camino Primitivo.
Cuenta la historia que un ermitaño llamado Pelayo, una noche en medio del bosque de Libredón, actual Santiago, vio unas misteriosas luces. Tras el extraño suceso, y unos sueños turbulentos, el ermitaño no dudaría de informar de los hechos al obispo de Iria Flavia, lo que hoy conocemos como Padrón (A Coruña). Este obispo, Teodoro, tras presenciar la misteriosa luz tuvo una revelación: allí mismo se encontraban los restos del apóstol Santiago. Teodoro se trasladaría a Oviedo a informar a su rey, Alfonso II, del hallazgo, quien partiría desde Oviedo hasta allí, convirtiéndose en el primer peregrino de la historia.
Por su patrimonio cultural
Nada más comenzar a hacer el Camino Primitivo, en Oviedo, podrás encontrar reliquias increíbles, como son las guardadas en la Cámara Santa de la Catedral de San Salvador, refugio del supuesto Santo Sudario, el paño que tapo la cara de Cristo, y la Cruz de los Ángeles, ofrecida por Alfonso II el Casto en el año 808.
Siguiendo el camino te toparás con muchos más edificios de gran importancia, como el Monasterio de San Salvador de Cornellana o la colegiata de Santa María la Mayor en Salas.
Y, ya que pasarás por Lucus Augusti (Lugo), no te puedes perder la única muralla romana del mundo que se conserva entera, considerada Patrimonio de la Humanidad.
Además, el camino en sí mismo ya constituye un gran patrimonio cultural, pues desde el 5 de julio de 2015 está inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Por sus paisajes: el Camino Primitivo más verde
Asturias y Galicia, ¿hay algo más que añadir?
Puede ser que tomar la decisión de hacer el Camino Primitivo sea una decisión difícil, pues los desniveles que se encuentran al caminar por parajes con tan diversa orografía no se deben subestimar.
Claro está, que asumir este mayor esfuerzo, te va a resarcir con los maravillosos paisajes del noroeste de España. Verdes prados, bosques frondosos, viento fresco… estampas que no se encuentran en cualquier lugar.
Cada paso en el Camino Primitivo es una invitación a disfrutar del viaje tanto como del destino.
Por su gastronomía: nada mejor para hacer el Camino Primitivo con energía
Y, por supuestísimo, después de hablar de los paisajes de esta zona, hay que hablar de su gastronomía.
No puede haber mejor sitio para recuperar fuerzas que estas dos regiones, famosas por su abundante y exquisita comida. Un buen plato de fabada, un cachopo, empanada gallega, una tapa de pulpo a feira… Te recomendamos parar, siempre que tengáis la oportunidad, en casas de comida casera, regentados por locales que llenarán tu estómago y tu mente.
Y para terminar, ¡una riquísima porción de Tarta de Santiago en la Plaza del Obradoiro!
¡Buen camino!